Terminar una presentación con frases como «Bueno, pues esto es todo amigos», «Hasta aquí mi presentación» o «Esto es todo lo que quería contaros» no es lo más recomendable. Ten en cuenta que, aunque el resto de la presentación haya sido buena, si no cuentas con un buen cierre que transmita emoción y fuerza perderás la oportunidad de generar en la audiencia ese “efecto WOW” que haga que la exposición sea memorable. 

Para lograrlo no hace falta que llegues al nivel de la presentación del mago Marco Tempest en TED -él juega en otra liga-, ni que seas un crack del diseño en Power Point. Basta con poner en práctica una serie de consejos que te ayudarán a cerrar tu presentación de manera efectiva y, en el mejor de los casos, llevarte unos buenos aplausos. 

Plantea una idea, duda o pregunta al inicio y acaba dando la respuesta al final. Es una manera de redondear toda la presentación, de darle sentido a todo el contenido expuesto. Está técnica no deja indiferente pues sirve para hacer una llamada a la acción y provocar una reflexionar en la audiencia. Mira cómo lo hace Nancy Duarte, una de las mayores expertas en presentaciones, en una de las prestigiosas charlas TED.   

La regla del 3. La mayoría del público solo se queda con la última parte de una presentación, así que aprovecha los últimos minutos para recordar o resumir en tres frases las ideas principales. 

Acaba con una frase célebre o una idea provocadora que tenga relación con el tema de la presentación. Es un buen recurso para sustituir a la típica diapositiva con la palabra gracias. 

Cuenta una pequeña historia. Termina tu presentación con una historia a modo de moraleja que impacte, que sea interesante, que se recuerde y que logre una conexión emocional con la audiencia. 

Además de aplicar a tu presentación estos consejos, para que un acto de comunicación sea un éxito no olvides dedicar tiempo de calidad a preparar la presentación en voz alta y si es posible delante de alguien. Y no olvides controlar tu comunicación no verbal hasta el final para evitar que un mal gesto ensombrezca el resto de la presentación. 

Si no tienes experiencia hablando en público, te pueden los nervios cada vez que tienes que ponerte delante de una audiencia o necesitas ayuda para hacer buenas presentaciones entonces necesitas un entrenador de comunicación y presentaciones. Te ayudará a estructurar el contenido, utilizar la técnica de storytelling, dominar el lenguaje no verbal, controlar los nervios o conocer las técnicas de la oratoria para emocionar, persuadir y convencer. 

Ser un buen comunicador es una de las habilidad clave para los reclutadores y más difíciles de encontrar entre los candidatos, según “The Bloomberg Recruiter Report. Si te interesa formarte o necesitas ayuda con tu comunicación personal o profesional en Elocuent podemos ayudarte. Ponte en contacto con nosotros en info@elocuent.com. Aceleramos tu Comunicación. 


Esperamos que te haya gustado " Formas de terminar una presentación para conseguir el efecto WOW ".
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